Apreciado Lluís,
Como sucede a menudo, una frase o un gesto, enciende la chispa de la empatía emocional. Gracias por tu artículo Cosecha de 2011.
Por muchos avances tecnológicos y velocidad de calculo que queramos, el recorrido físico y la introducción manual humana de la información requiere de tiempo y, mucho más tiempo requiere, saber interpretar la realidad socio económica del mero ratio de cálculo obtenido que es una mera referencia de la realidad. La ratio o dato conseguido, está caducado mucho antes de obtenerse, pues la realidad sigue su curso a la velocidad de la luz, desvirtuando la esencia del resultado, a consecuencia de la interactuación dinámica continua de millones de acciones y personas en todo momento y situación hasta el siguiente balance, prueba o test que se quiera.
Obviamente, es cierto que toda esta cacharrería posibilita el adelanto en la toma de decisiones, en ocasiones más intuitivas que ciertas, que permiten explorar hipótesis teóricas en algunos casos y llevarlas a la práctica con los consecuentes riesgos y desastres que en multitud de ocasiones se producen, como la actual crisis socio económica. Con todas estas bondades, hay un grave problema: la tecnología por muy rápida y capaz que sea en sus cálculos, no se puede equiparar a la capacidad de interpretar y actuar del ser humano que tiene capacidades limitadas en los medios de hablar, escribir y movilidad, además de los condicionantes de conocimiento, capacidad, interpretación y análisis.
Posiblemente, más que el cambio generacional como ha sucedido a lo largo de la historia, la velocidad y caducidad del conocimiento dinámico de cada momento, aunado a la dedicación plena por la vivencia diaria en resolver improvisadamente los problemas cotidianos se acerque más a la diana de la esencia del problema de integración generacional.
Ya en el año 1992, Bush padre le dijo a Clinton ("es la economía, estúpido...") parece ser siempre la respuesta. Así, el valor impropio otorgado al dinero por la cultura dominante, es parte del problema, siendo que solo debiera ser un instrumento de intercambio o tránsito de libre acceso y disponibilidad.
Los ingredientes del cóctel empiezan a tomar cuerpo una vez sumados a los anteriores, la caducidad del conocimiento, la ignorancia y las pasiones, son el mayor enemigo del ser humano que es capaz de ser inteligente, aprender, e interpretar objetivamente los límites de su entendimiento y conocimiento.
Llegados aquí, asoma la carencia relevante de dos ingredientes, un líder o grupo de líderes y un sistema regenerador y aglutinador socio económico que facilite y promueva "La motivación por el progreso y el bienestar del ser humano".
Gracias y Saludos,
Juan Bernardo montejb
Juan Bernardo montejb
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